Explorar

Ennio explora su trapito

En este momento no hay verbo más apropiado para ti, hijo. Tus sentidos se abren como hojas al sol. Explorar es ignorar el tiempo o el miedo. Para ti, los objetos son misterios que se deben sentir con los dedos de las manos y de los pies; con la boca, babearlos, porque es la única manera de conocer su textura; darles la vuelta, atraparlos con la mirada. Y, si algún otro objeto produce un ligero ruido que llegue a tu oído, ordenas a tu cuerpo, impulso de supervivencia, llegar como sea a esa nueva fuente de sonido o color, para sentirlo con los dedos de las manos y de los pies, con la boca, probarlo, darle la vuelta, abarcarlo por completo con la mirada, sin importar que se trate del control del televisor o de una botella de plástico o de un trapito. Para ti, cualquier objeto encierra un misterio que debe pasarse por todos los sentidos.